Opciones de tratamiento ambulatorio mínimamente invasivo
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¿Qué es la enfermedad arterial periférica y qué la causa?
La enfermedad de las arterias periféricas, o EAP, es el estrechamiento de las arterias "periféricas", que son vasos sanguíneos en las extremidades, el abdomen y la cabeza. Puede ser una afección dolorosa y, si no se trata, puede provocar movilidad limitada, gangrena, amputación y, a veces, incluso la muerte.
La EAP es causada por una acumulación de colesterol y tejido cicatricial en las paredes de las arterias, formando una sustancia conocida como placa. Esta placa se acumula gradualmente y obstruye la arteria con el tiempo, restringiendo el flujo sanguíneo. En algunos casos, la EAP es causada por coágulos de sangre que se desprenden del interior de las arterias más grandes y se alojan en arterias más estrechas, lo que también reduce el flujo sanguíneo.
¿Cuáles son los factores de riesgo de la EAP?
Los factores de riesgo que pueden provocar PAD incluyen presión arterial alta, colesterol alto, diabetes/síndrome metabólico, antecedentes familiares, sobrepeso y ser mayor de 50 años. Se estima que el 20% de los estadounidenses mayores de 65 años tienen PAD y que dejar de fumar reduce su riesgo en 60% dentro de diez años.
¿Cómo sé si tengo PAD?
La EAP a menudo no es diagnosticada por los proveedores de atención médica y sus síntomas a menudo se confunden con otras afecciones, como la neuropatía o los dolores y molestias del envejecimiento.
Los síntomas típicos de la EAP incluyen:
- Dolor, entumecimiento, hormigueo o debilidad en las piernas
- Cambios en el color de los brazos o piernas.
- Heridas en pies o dedos de los pies que no sanan o sanan lentamente
- Disminución de la temperatura de la parte inferior de las piernas y los pies en comparación con el resto del cuerpo.
- Disfunción eréctil
- Mal crecimiento de uñas o cabello.
La buena noticia es que la EAP se diagnostica fácilmente con pruebas simples e indoloras, que incluyen un examen físico realizado por su proveedor, índice tobillo-brazo, ultrasonido, rayos X, tomografía computarizada y resonancia magnética. En algunos casos, se puede realizar una angiografía para identificar la ubicación precisa de las obstrucciones.
¿Cuáles son las opciones de tratamiento para la EAP?
Si la EAP no es grave, se puede tratar con medicamentos y/o ajustes en el estilo de vida. Sin embargo, si ha progresado hasta el punto en que se necesita intervención, nuestros especialistas vasculares e intervencionistas ofrecen procedimientos para que usted y su proveedor consideren:
| angioplastia | En el lugar de la obstrucción dentro de la arteria, se inserta un pequeño globo que se infla para abrir el vaso sanguíneo. |
| Stents | Un stent es un pequeño “andamio” metálico que se inserta en el sitio de la obstrucción para abrir el vaso sanguíneo y mantenerlo abierto. |
| Trombólisis dirigida por catéter | Si la obstrucción en el vaso sanguíneo es causada por un coágulo, se usa un medicamento especial conocido como "destructor de coágulos" para disolver eficazmente el coágulo y restaurar el flujo sanguíneo normal. |
| Aterectomía | Una alternativa a la angioplastia, este procedimiento es una técnica para eliminar la placa de los vasos sanguíneos con un catéter y un dispositivo que rompe la placa. |
| Injertos de stent | Cuando una arteria ya no puede funcionar, un stent especial cubierto con una tela sintética puede reemplazar o evitar la arteria enferma. |
Cada uno de estos procedimientos se realiza de forma ambulatoria y no requiere hospitalización.
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